Puebla, entre los 4 estados con más niños intoxicados con plomo
Puebla forma parte de la región del país que registra el mayor nivel de intoxicación por plomo entre niños de uno a cuatro años de edad en México, según lo destaca la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de 2022 (Ensanut).
A nivel nacional se expone que en este rango de edad se identifican a 8 millones 401 mil 190 niños y niñas.
Sin embargo el 16.8 por ciento, es decir, un millón 407 mil 498 menores de edad, presentan algún nivel de intoxicación con este elemento.
La región del país con mayor prevalencia de intoxicación por plomo es el Pacífico Sur, comprendida por los estados: Guerrero, Morelos, Oaxaca y Puebla.
Después se ubica la Zona Centro integrada por: Hidalgo, Tlaxcala y Veracruz.
Cabe señalar que en la edición de la Ensanut 2018–2019 el 17.4 por ciento de la población infantil en México presentaba niveles de plomo en su sangre, por lo que el nivel se ha mantenido en los últimos cuatro años.
Asimismo se advierte que una tercera parte de la población en el país está expuesta de forma “ambiental” a la intoxicación por plomo, es decir, por su cercanía a talleres mecánicos o de pintura.
En tanto que 33.3 por ciento de la población está expuesta al plomo por el uso de barro vidriado para preparar, almacenar o consumir alimentos y bebidas.
En 17 entidades federativas se reporta intoxicación por este metal superior a 10 por ciento de la población.
De la población entrevistada para elaborar la encuesta, 67.5 por ciento reportó haber estado expuesta a una o más fuentes de contaminación, como la ambiental, barro vidriado y paraocupacional, es decir, la utilización de materiales con plomo o que producen emisiones de este metal.
Mara Téllez Rojo, investigadora en Ciencias Médicas en el Centro de Investigación en Nutrición y Salud (CINyS), consideró urgente implementar acciones para el control y prevención de la exposición al plomo por el uso de loza de barro vidriada.
Así como identificar regiones y estados más afectados para diseñar una estrategia focalizada, así como continuar el monitoreo poblacional que se realiza desde 2018 a través de las Ensanut, con el propósito de vigilar las tendencias poblacionales de este rezagado problema de salud pública.